Terrorismo combatido por terroristas.

Grande fue mi sorpresa, cuando me enteré por medio de la Prensa, que el gobierno colombiano asesora a la policía y otras fuerzas del supuesto orden en materia de seguridad y lucha contra el terrorismo, que incluye al secuestro.
El estado colombiano, recibió en una época más de 1000 millones de dólares por año, para la compra de armas y la instalación del terror. El Plan Colombia, instauró el terror y la masacre en todo el país. La DEA, junto con las fuerzas de represión colombianas, administran el tráfico de estupefacientes y además formaron (y eso se comprobó) grupos paramilitares que asesinaban extrajudicialmente a todos/as los/las enemigos/as del estado, llamando así a los opositores.
La Unión Patriótica, que aglutinó a varios sectores en discordia y logró hacer deponer las armas a varios dirigentes de las FARC, para empezar el proceso de lucha electoral, fue sistemáticamente aniquilada por “oscuros sectores” del gobierno.
¿Porqué un gobierno que quiere la paz, asesina a otro grupo político? Pues el negocio está en la venta de armas, en el tráfico de drogas, en el terror de la población. El infundir terror, crea las condiciones necesarias para la instauración de un escenario de guerra, en donde la militarización y la carrera armamentista se pueden justificar.
¿Por qué el congreso paraguayo no se rasga las vestiduras y denuncia la ingerencia externa en la política interna de nuestro país? ¿Por qué permiten que cómplices de magnicidio y genocidio, que aún hoy persiguen a la Unión Patriótica nos asesoren? ¿Qué busca el gobierno colombiano en nuestro país?.
Colombia, es la punta de lanza de los EE.UU. reservas de gas, petróleo, agua y biodiversidad son las metas de estos acuerdos. Los militares norteamericanos que estaban haciendo “operaciones conjuntas”, estaban fotografiando nuestro país (según información que obtuve de fuente confidencial). Un militar Yanqui, Ing. Hidráulico se casó con una concepcionera. ¿Qué hacía un ingeniero Hidráulico en Concepción?. No es muy difícil adivinar lo que está pasando.
En resumen, Paraguay está siendo invadido por el terror, por la criminalización de las luchas sociales, por el armamentismo, por el narcotráfico.
Espero, que luego de escribir este texto, no sea llevado a declarar, como enemigo del estado y quedar a disposición de estos asesinos que están camuflados detrás de sus uniformes de policías.